Los colores y su significado forman parte de cada cultura y están relacionados directamente con las características y los cambios de una sociedad en el tiempo. Sin darnos cuenta, seguimos los códigos sociales del color que han ido cambiando a lo largo de la historia. Y es que lo que nos transmiten o sugieren los colores no solo pertenece al mundo de la emoción y lo subjetivo a nivel individual, sino que también está relacionado con la antropología: al comportamiento conjunto de las sociedades y las diferentes culturas, y por tanto a las relaciones mentales que se establecen a una amplia escala. En una misma sociedad solemos coincidir en relacionar cierto color con una emoción o una idea. Pero según la norma anterior, los códigos de color varían en una población alejada de la nuestra. Por ejemplo, el blanco indica pureza para gran parte de la población occidental. Sin embargo, en algunos países asiáticos, el color blanco sugiere ideas como el atraso o la mala suerte.
El color es un signo cultural muy importante. Pero en decoración también valoramos los colores de otras maneras: por su valor artístico, sus cualidades en cuanto a la luz, su modernidad, su alegría o por su valor como tendencia decorativa en un momento determinado, entre otros. Con nuestra particular “color-terapia” invernal queremos animarte a introducir colores en tu hogar sin ningún miedo. La moda en decoración ha hecho habituales las combinaciones de diferentes diseños y colores en la ropa y complementos del hogar para una misma habitación. No solo combinaciones de diferentes tonos de una misma gama de color, sino también mediante contrastes marcados. Ahora es posible, incluso añadiendo estampados, conseguir armonía visual con diferentes colores en un mismo cuarto de la casa.
Los colores proporcionan a la decoración un plus de frescura y modernidad. Si se empieza por las paredes, todo color vale si se elige suave para tener más posibilidades con el mobiliario. Hay que tener en cuenta que colores muy intensos como el rojo o el morado pueden llegar a cansar visualmente y no invitan a la relajación y la concentración. Recomendamos pintar una sola pared de un color intenso, por ejemplo, pero pintar las demás de blanco para relajar la zona visualmente. Se trata de encajar para llegar a la armonía, no de renunciar a los colores.
Como hemos dicho, los colores más pastel o rebajados ofrecen más posibilidades en la decoración del resto de la habitación. Y por supuesto, las paredes blancas siempre van a ofrecer más luz y un buen lienzo despejado para decorar con los colores de los complementos y muebles a nuestro gusto. Por otro lado, el papel pintado se ha vuelto a poner de moda y puede ser un buen aliado para darle el toque especial a una pared de manera fácil y sin el engorro de la pintura. Se necesita un poco de mano, precisión y paciencia, pero merece la pena porque puede convertirse en un lugar muy especial en la casa. Hay una infinidad de variantes: con estampados geométricos, psicodélicos, diseños barrocos, con dibujos de animales para los más peques… Pero los que más nos gustan a nosotros ahora mismo son los modernos estampados vegetales, que ayudan a crear rincones selváticos de helechos o delicadas hojas orientales.
Si te gusta este estilo, sabrás lo que significa: el minimalismo y la sobriedad se han acabado. Llena las repisas y estanterías de objetos coloridos como marcos, jarrones, velas, flores, libros u objetos de artesanía o cerámica por doquier y
tendrás un resultado muy chic y moderno. Al mismo tiempo, las telas y complementos serán el aliado perfecto de los que quieren intoducir el color poco a poco o los que no quieran arriesgarse tanto. Sabemos que incluso para el cuarto de baño más sobrio, unas toallas de colores que estén a la vista, como las que tenemos en La Huerta de algodón, alegrarán la estancia y le darán un toque de energía.
Los cojines de colores, o los plaids y mantas también se han convertido en el complemento más buscado por los menos arriesgados pero que desean un toque decorativo de vitalidad y confort al mismo tiempo. Ahora es posible, por ejemplo, reunir en un sillón tonos tierra un plaid naranja y un cojín estampado azul naif. Y lo mismo ocurre en los dormitorios. Combinar los colores de las mantas con los de los cojines sobre el edredón nos parece un plus para convertir la estancia en cálida y acogedora al tiempo que los complementos dan vida al cuarto.
Como los diseños coloridos nos traen el recuerdo de la luz y la alegría de la tierra valenciana y sus tradiciones, en La Huerta Valenciana ofrecemos una amplia colección de ropa de hogar con una variada gama cromática. Entre uno de nuestros productos destacados, los edredones de la marca Reig Marti, podrás encontrar todos los colores en los estampados, y diseños que se adaptan a cualquier estilo de habitación. Los plaids de La Huerta Valenciana, como el Plaid Galia y Plaid Tribal de Manterol, están disponibles en una gran variedad de colores. Y los cojines Bronson o Pehuen te conquistarán con su intensidad de color.
Pásate por la tienda y echa un vistazo.